Esta serie se gesta en un proceso de creación recíproco entre grabados y poemas. Aparece la preocupación por los temas universales de la naturaleza humana: el amor, la muerte, la maternidad, el ser mujer, la soledad, entre otros. En un desarrollo dialéctico de composición del discurso, los protagonistas se ahogan, por momentos, en una matriz que los comprime, en las abigarradas texturas o en los negros que se sobreponen a sus universos: Pájaro y muerte, Cadalso, La condena de la flor, en los que la angustia subyace a las imágenes. Sin embargo, con las mismas texturas, aparecerá, como en Olivia Yungas, la celebración de la vida, lo fecundo, la tierra, la selva.